Mujeres feas las hay a montones en la tierra. Pero la mujer de quien voy a contarles era mucho más que espantosa; era un monstruo. Tenía una nariz, una boca, unos ojos…que será mejor que no les describa. A este horrible ser, se le conocía como la Madre Barrabás.
La Madre Barrabás llevaba siempre la escoba en la mano. Con ella limpiaba la casa, amedrentaba a quienes le faltaran al respeto y le pegaba a su hija. ¡Ah! Había olvidado mencionar que tenía una hija, Isabel.